No tengo tarjeta de crédito, por motivos que no vienen al caso. El tema está en que quería ver unos contenidos de una WEB PORNO y no había otra forma de verlos que PAGANDO ONLINE mediante tarjeta de crédito. Llamé a un amigo para que efectuara él el pago y le abonaría la pasta en mano a posteriori. El precio (precio q yo acepté previamente, porque me parecía aceptable) era de 1€ y había unas SUGERENCIAS de distintos precios y servicios para fidelizarme como cliente, con el intento de que me hiciera miembro y visionara más a menudo los contenidos. Yo simplemente, de momento, sólo quise pagar el euro para satisfacer mi necesidad inmediata, que era simple: ver pollas, tetas, culos y coños y a poder ser con un poco de gracia (porque por cierto, cada vez más las ESCENAS "de batalla" son MÁS ELABORADAS). Mi sorpresa fue que me llamó mi amigo el día siguiente y me dijo que por culpa de este pago online tuvo que anular la tarjeta ya que le habían efectuado distintos cargos que ascendían a más de CUARENTA VECES MÁS QUE EL PRECIO ACORDADO. ¡QUISE PAGAR UN EURO Y ACABO PAGANDO MÁS DE CUARENTA! ¿PERO A QUÉ COÑO VIENE ESTO? Os lo voy a decir, señores promotores, con vuestro idioma: ¡¡¡¡¡¡ E S T Ú P I D O S !!!!!!
El que queda con CARA DE TONTO es el CONSUMIDOR, porque estadísticamente hay consumidores que, como yo, disponen de poco tiempo y confían en que el proveedor de contenidos no les tomará el pelo, pero sí: ALGUNOS WEBMASTERS ACTÚAN de esta PÍCARA forma:
- Publicitan sus productos a precio económico y sugieren un precio más elevado pero con derecho a más días para consumir el audiovisual.
- Una vez has dado los datos bancarios te cobran una cantidad que no era la acordada en letra grande (la letra pequeña sí que lo especifica para quedar CUBIERTOS LEGALMENTE).
- La sugerencia, contractualmente mediante mail automático, pasa a ser el precio económico inicial propuesto en la publicidad y el servicio que compras ya no es el precio inicial sino el precio más elevado que te sugerían en la publicidad.
Conclusión, que los consumidores del montón (los tontos que actuamos de buena fe) nos quedamos como el ratón de la siguiente foto:
Vuelvo otra vez:
¡ E S T Ú P I D O S ! ¿QUÉ NO SABÉIS QUE UNA MALA OPINIÓN TIENE UN EFECTO MÚLTIPLES VECES MÁS ELEVADO QUE UNA BUENA OPINIÓN? ¿QUÉ NO VALORÁIS QUE MI AMIGO YA NUNCA MÁS VA A ENTRAR A VUESTRA PÁGINA Y YA NO VA A PAGAR MÁS ONLINE? Y LO PEOR: PERJUDICÁIS A TODO EL SECTOR :-)
Y DESPUÉS SE QUEJAN LOS MUY INÚTILES. Bueno, no tan inútiles, porque haciendo números seguro que les sale a cuenta. Pero seguiré pensando a la antigua: hay que cosechar con esfuerzo y buenos alimentos para obtener un rendimiento continuo que tenga contento al consumidor y no cree mala reputación en general.
LAS BUENAS COSTUMBRES DEBERÍAN DE IR POR ENCIMA DE ESTAR CUBIERTO JURÍDICAMENTE Y ACTUAR CON PICARDÍA.
